…de Regreso Analizando el consumo Domestico

Después de un breve descanso, o retiro prematuro a mi insípida carrera de seudo escritor, de las quemada radical de temas y vertiginosa carrera de escribir y de no tener ni puta idea sobre que hablar, retorno intentando de nuevo en escribir meras estupideces, con tendencias en decadencia y simbología seguramente idiota y sin sentido.

El tema de hoy se da en la soledad y monótona vida mía, en aquel apartamento de obrero trabajador. Me he quedado pensando estos últimos meses, ¿por que coños todas las cosas de consumo (no incluir enteogenos) se acaban específicamente justo al mismo tiempo?, finalizando el mes, es decir para explicarme mejor, exactamente un día en la mañana vemos que no hay crema dental, enjuague bucal, desodorante, papel higiénico, jabón….

Ustedes dirán, ¡pues guevon, si no compro!, si es verdad, pero si le aplicamos la matemática lógica de las proporciones (sabrá T-obi-Juan-que-NO-vi, si existen), ningún producto se debería acabar relativamente en un casi mismo momento, mirándolo desde la perspectiva desordenadamente proporcional, esto es por que las cantidades y las medidas son distintas; Ejemplo, es diferente la cantidad en centímetros cúbicos de un shampoo a la cantidad de metros de un papel higiénico, es diferente la cantidad de toallas higiénicas ultra compacta delgaditas que caben en una caja de fósforos a un enjuague bucal, NO SON LAS MISMAS CANTIDADES...

… Y sin embargo sucede que se tienden a terminar en el mismo instante. Si por lo menos quedara solo pasta dental, me bañaría con solo ella, me la echaría como desodorante, pero no, al puto y caprichoso destino le da por aplicar su inconsciente y caótica decisión, me atrevería a decir que pareciera que están programadas para que suceda así y dado esto tendríamos el casi honor de establecer una conclusión, SI estamos conectados a la MATRIX, definitivamente software conspirador en nuestras narices.